jueves, 12 de marzo de 2009

Antes de dormir


Quiero escribirte y quiero que me leas. Quiero que interpretes bien esta señal de auxilio, ¡Ayuda! Quiero reinventarte en mí, de una vez, y por fin poder sacarte de acá, de este acá tan adentro.
Quiero que me conozcas, que veas esa infinidad de pedacitos que me constituyen. Quiero reinventarte y que, esta vez sí, me hagas bien, que esta vez sí sepas cómo reacccionar
(y cómo no).
'Cada vez que esto pasa, terminás igual: terminás con vos misma. Te des-hacés de todo lo que te constituye; y los que alguna vez lo hicieron, ya no quieren acercarse a vos (por miedo, miedo a lo mismo). Eso es lo que te mata, lo que cada día te mata: vos, y tu corroído corazón, ese que quiere morir y matarte cada vez que lo hacés, y cada vez más, a cada día, te odia más, '
(te odio más).
Y tanto tuve que pensar en vos para poder llegar a la conclusión de odiarte, que simplemente ya no puedo sacarte de mi cabeza (de ninguna parte, de ningún lugar, de todo ese vacío que formás y conformás).
Quiero morir. A cada día que entiendo lo que (me) pasa, me doy más cuenta de lo que no pasa, de lo que está faltando y quizás nunca fue perdido.
Hay todo un mundo para vos, que cada día no estás viendo, y vas perdiendo. Me vas... Sí, no. Blanco, negro. Muerta, tuya.
Son opuestos, y puro bla bla, pero seguimos en la misma.
Y, ¿sabés qué es lo peor? Entender la realidad de que no voy a tenerte, y no (poder) aceptarla.

please stop lying-

No hay comentarios: